Me gustaba mirarte mientras dormías profundamente como la víctima de una sesión de hipnosis.
El ventilador del techo y la luz de la tarde proyectaban sombras chinescas en la espalda de la siesta.
Me fascinaban los surcos de tus costillas como serpientes reptando hacia el refugio de tu vientre.
De la calle en llamas llegaba un bullicio asiático de bocinazos, motores de dos tiempos y acentos imposibles,
mientras yo esperaba paciente a que abrieras los ojos y conjuráramos de nuevo el ancestral misterio de la carne.
HYPNOSIS
I liked to look at you while you were sleeping soundly as the victim of a session of hypnosis.
The fan in the ceiling and the afternoon’s light cast shadows on the nap’s back.
I was fascinated with your ribs’ grooves like snakes creeping for shelter into your belly.
From the street on fire came an Asiatic hubbub of toots, two-stroke engines and impossible accents,
while I patiently waited for you to open your eyes so we could invoke again flesh’s ancient mystery.