Hoy alzo mi copa por José Saramago,
un hombre que vivió y escribió sin hacer daño.
El maestro que nos dio su última lección
de lo injusto que es este mundo
muriéndose antes que políticos anquilosados,
banqueros endiosados y directores jubilados
que tienen las fauces manchadas de sangre.
Ellos morirán cuando mueran y Don José, aun muerto,
sigue vivo.
Él, que solo quiso
ser un nombre más entre todos los nombres,
humano hasta la médula,
capitán de los vencidos.
Santa Cruz (Valencia), sábado 23 de octubre de 2010
SARAMAGO
I raise my glass today to José Saramago,
a man who lived and wrote without doing any harm.
The master who gave us his last lesson
about how unfair this world is
when he died before stagnant politicians,
conceited bankers and retired directors.
They will die whenever they die and Don José, yet dead,
is still alive.
He who just wanted
to be one name among all names,
human to the bone,
captain of the defeated.
Santa Cruz (Valencia, Spain), Saturday October 23rd 2010